Está clavada en el top 10 de Netflix desde el 2019, y se ha convertido en un fenómeno de memes en internet. Aquí desmenuzamos las razones de su éxito.

Es oficialmente coronada como la telenovela más exitosa de todos los tiempos, ganando un récord Guinness en 2010 que lo demuestra. Se estrenó en 1999 y hasta el día de hoy sigue vigente. Ha sido adaptada al menos unas 28 veces y es sin duda la producción de telenovela con mayor número de adaptaciones de la historia. Su versión original se transmitió en más de 180 países y ha sido doblada a 25 idiomas, ¿pero qué es tan interesante sobre esta historia?.

‍Personajes imperfectos

Todos conocemos la historia, Betty es el patito feo de la oficina, acostumbrada a ser invisible, pero con un corazón de oro, finalmente se convierte en el cisne que siempre fue por dentro y la gente se fija en ella. Pero esta teleserie no es sólo la historia de Betty, sino que es un collage de personalidades muy coloridas y diferentes. Tenemos al supuesto “hombre ideal”, Armando, que no es más que un mujeriego, infiel y tremendamente misógino, que claramente estaría cancelado en estos tiempos, al igual que su BFF Mario. Berta es tremendamente chismosa, Patricia Fernández, es casi una modelo, pero no hace nada si no es por dinero, y Marcela Valencia tiene una tremenda dependencia emocional en una relación tóxica con Armando.

Nadie es el arquetipo de lo perfecto, la misma Betty, que parece ser la más cuerda del grupo, tiene serios problemas de autoestima y autovaloración, por consecuencia de su aspecto físico, pero a lo largo de la serie, vemos como la mayoría logra tomar esos defectos y trabajar en ellos para convertirse en personas un poco más normales y felices.

‍Betty, la feminista

En muchos casos, el personaje de Beatriz Aurora Pinzón Solano rompió con muchos estereotipos de la televisión. Es una economista brillante, que en más de una ocasión logra salvar el destino de Ecomoda, aunque nadie de un peso por ella. Ella sabe que no es la más agraciada, pero eso nunca es excusa para ella. Quizás en un principio le cuesta encontrar su voz entre los que la atacan, sin embargo ella no cree que su apariencia tenga que jugar un rol decisivo en el hecho de que la puedan tomar en cuenta. 

Ella misma plantea que “su vida emotiva y profesional no pueden depender de un bisturí, [...] y si la aceptara, mañana ya no dependería solamente del bisturí, sino terminaría dependiendo de una cuenta bancaria, después de un carro, después de un hombre, después terminaría dependiendo de todo”, imagínate escuchar algo así en la televisión de principios de los 2000, con una audiencia así de grande, claramente Betty es un personaje que marcó a toda una generación cuando dijo “yo soy así” (tu rum).

‍Serie de confort

Aquí en los Zappins creemos que se debería adoptar el término “serie de confort” en todo el mundo. Series como Friends, Gilmore Girls, Seinfeld, The Office, que puedes poner en el fondo mientras haces otras cosas, porque ya te las sabes todas, pero te gusta verlas porque te hacen sentir ese calorcito en el corazón, como si fueran un tecito en un día lluvioso. Betty, la fea es una de esas series y probablemente esa sea la razón n°1 por qué se clavó en el top 10 de Netflix (y es francamente lo único bueno que les va quedando).

Lo bueno es que les tenemos una tremenda noticia para quienes no tengan o quieran dar de baja ese servicio de streaming tan mala onda. Ahora puedes ver Betty, la fea por Comedy Central (44) todos los días desde las 09 hrs., que es uno de nuestros nuevos canales de la parrilla de Zapping y que por supuesto tiene opción Replay.